Todos los check-ins y check-outs se realizan en persona para garantizar que su propiedad se mantenga en buen estado. El depósito de seguridad se cobra y se devuelve una semana después de la salida del huésped, tras una inspección detallada.
Se proporciona una guía detallada de la propiedad para ayudar a los huéspedes a utilizar correctamente los electrodomésticos, minimizando el riesgo de daños. Además, todos los datos de los huéspedes se recogen y se envían a la SEF de acuerdo con los requisitos legales.